Utilizar métodos anticonceptivos de barrera como el condón no solo nos ayudará a evitar un embarazo no deseado, sino que también es una medida que reducirá la posibilidad de contagio de una infección de transmisión sexual. Esto es importante, ya que según la Academia Española de Dermatología y Venerología, en España 1 de cada 4 personas contraerá una infección de transmisión sexual antes de dejar el instituto[1]. El porcentaje de personas contagiadas de una infección de transmisión sexual crece anualmente, pero ¿sabes realmente qué son las ITS?
Se trata de un grupo de infecciones que se transmiten de una persona a otra a través de las relaciones sexuales o el contacto sexual y que pueden llegar a provocar infecciones más graves como ciertos tipos de cáncer, por lo que es muy importante tomar las medidas que estén en nuestras manos para prevenir este tipo de afecciones. Por ello, en el siguiente artículo te explicaremos de manera más profunda qué son las infecciones de transmisión sexual o ITS y cómo podemos evitarlas.
Infecciones de transmisión sexual ¿Qué son?
Entender qué son las infecciones de transmisión sexual y su forma de contagio es básico para cuidarte si eres sexualmente activo. Una ITS es una infección que puede estar provocada por bacterias, hongos, parásitos o virus y que generalmente se transmite por la sangre, semen y fluidos vaginales de una persona a otra a través de las relaciones sexuales, ya sea por vía vaginal, anal u oral. Además de estas formas de contagio, una infección de transmisión sexual también puede transmitirse tanto a través del contacto íntimo como compartiendo los juguetes sexuales con la persona infectada.
Aunque las personas más propensas de padecer una ITS son las personas sexualmente activas, especialmente los jóvenes y quienes tienen varias parejas sexuales, existen otros factores que aumentan el riesgo de sufrir este tipo de infección:
- Relaciones sexuales sin protección: tener sexo sin un método de protección de barrera como el preservativo aumenta considerablemente la posibilidad de contagiarte de una ITS.
- Antecedentes de ITS: si ya has padecido alguna infección de esta índole eres más propenso al contagio de ITS, como el VIH.
- Compartir agujas con otras personas: debido al intercambio de sangre que se produce con este hábito, compartir agujas puede propagar aquellas ITS que se transmiten a través del fluido sanguíneo, como la Hepatitis B o el VIH.
¿Cuántas ITS existen?
Una infección de transmisión sexual puede estar causada por bacterias, hongos, parásitos y virus, por lo que actualmente podemos encontrar más de 20 tipos de ITS. A continuación, te enumeraremos los tipos de ITS más frecuentes:
- Herpes genital: esta infección está causada por dos tipos de virus, el VHS-1 y el VHS-2. Aunque no existe una cura para el herpes, es importante acudir al médico para evitar consecuencias como la probabilidad de desarrollar infecciones tales como el VIH.
- Virus del papiloma humano (VPH): esta infección está causada por el virus del papiloma humano. A pesar de que no existe tratamiento, es importante acudir al médico en caso de aparición de verrugas en las zonas genitales.
- Hepatitis: la más común es la hepatitis B, la cual está causada por el VHB. Si no se trata, puede causar desde fibrosis hepática hasta algunos tipos de cáncer de hígado.
- Clamidia: está causada por la bacteria Chlamydia trachomatis y su falta de tratamiento puede provocar infertilidad en el caso de las mujeres.
- Tricomoniasis: es una ITS causada por el parásito Trichomonas vaginalis y su falta de tratamiento puede aumentar el riesgo de contraer otras infecciones o infecciones como el VIH.
- Candidiasis: está provocada por el hongo Candida albicans y la falta de tratamiento puede agravar los síntomas de esta infección.
- Gonorrea: está causada por la bacteria Neisseria gonorrhoeae y la falta de tratamiento puede producir con el tiempo esterilidad en las mujeres y riesgo de contraer el VIH.
- VIH/SIDA: es una infección provocada por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH). La principal consecuencia del VIH si no se trata es la destrucción de las células del sistema inmunitario, conduciendo al síndrome de inmunodeficiencia adquirida o SIDA y dejándonos expuestos a cualquier infección y.
- Sífilis: está provocada por la bacteria Treponema pallidum y si no se trata a tiempo puede tener consecuencias graves para la salud, como daños cerebrales (en etapas muy avanzadas).
- Vaginosis Bacteriana: está provocada principalmente por la bacteria Gadnerella vaginalis y es importante seguir el tratamiento para no agravar sus síntomas, como el ardor y dolor al orinar.
- Chancroide: esta infección de transmisión sexual está causada por una bacteria denominada como Haemophilus ducreyi. El principal síntoma de esta ITS es las aparición de úlceras dolorosas (en el caso de los hombres), por lo que si no se trata, estas llagas pueden afectar al tejido de alrededor y provocar infecciones más graves.
- Sarna: está causada por una parásito llamado Sarcoptes scabiei y su falta de tratamiento puede agravar los síntomas de picazón y sarpullidos en la piel.
- Piojos púbicos (ladillas): está provocado por un parásito conocido como Pthirus pubis y es importante tratarla para evitar la expansión de estos organismos por el cuerpo.
Otras infecciones o enfermedades de transmisión sexual menos comunes:
- Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP): provocada por bacterias que causan la clamidia y la gonorrea.
- Cervicitis mucopurulenta: infección causada por otras ITS como la clamidia y gonorrea.
- Molusco contagioso: causado por el virus Molluscipoxvirus.
- Linfogranuloma venéreo (LVG): causada por la bacteria Chlamydia trachomatis.
- Campilobacteriosis: provocada por la bacteria Campylobacter.
- Citomegalovirus: causado por el virus Betaherpesvirinae.
- Salmonelosis: causada por la bacteria Salmonella.
¿Cómo evitar el contagio de infecciones de transmisión sexual?
Si eres sexualmente activo debes saber que el único método anticonceptivo que puede prevenir el contagio de una ITS es el preservativo, siempre que se use en cada relación sexual y durante todo el encuentro. El uso correcto del preservativo de látex durante el sexo vaginal y anal reduce entre 80 y 90% el riesgo de contraer VIH y otras ITS[2]. Sin embargo, también es importante recalcar que este método deja de ser efectivo si se utiliza de manera incorrecta, por lo que es recomendable que antes de las relaciones sexuales nos aseguremos de que el condón está bien colocado.
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¿Cómo saber si tengo una ITS?
No resulta sencillo saber a simple vista si tenemos una ITS, ya que la mayoría de estas infecciones no suelen producir ningún tipo de síntoma. Sin embargo, si hemos tenido relaciones sexuales sin protección y especialmente si sospechamos que la otra persona puede tener una ITS, es importante acudir a un profesional como el ginecólogo, urólogo o dermatólogo, ya que son los encargados de diagnosticar y tratar las ITS, para realizarnos pruebas de rutina que permitan determinar si padecemos alguna de estas infecciones.
Adicionalmente, si somos sexualmente activos, es importante realizarnos chequeos médicos frecuentes para descartar la presencia de infecciones de transmisión sexual.
Para aportar una mayor seguridad a cada encuentro sexual, recuerda utilizar el condón para estar protegido durante el sexo y así reducir el riesgo de contagio.
[1] Nota de prensa de la AEDV, 8 de agosto de 2016
[2] Eaton EF, Hoesley CJ. Barrier Methods for Human Immunodeficiency Virus Prevention. Infect Dis Clin N Am 2014; 28: 585–599.