La zona íntima femenina es una parte del cuerpo muy delicada, con características que la hacen única. Así, su pH óptimo oscila, en general, entre 3,5 y 4,5 y es fundamental que se mantenga entre estos valores porque son los que garantizan la supervivencia de su flora bacteriana. Si este pH se modifica, podrá aumentar la población de patógenos responsables de molestias e infecciones. Por eso, si te estás preguntando qué jabón usar para la higiene íntima, la respuesta siempre va a ser uno específico para esta zona. No todos sirven porque algunos productos de higiene pueden interferir en el equilibrio vaginal, perjudicando su salud. A continuación, explicamos por qué escoger un jabón para la higiene vaginal y por cuál decidirte.
¿Por qué usar productos especiales para la higiene íntima femenina?
Dadas las particularidades de la zona íntima femenina, es muy importante utilizar solo productos formulados especialmente para la higiene vaginal. Son los que garantizan el mantenimiento de su pH. El pH es una medida del 0 al 14 que indica si un medio es más o menos ácido. Un pH óptimo vaginal mantiene la flora bacteriana en equilibrio. Cuando hablamos de flora bacteriana, nos referimos al conjunto de microorganismos, sobre todo lactobacilos, que viven de forma natural en la vagina y contribuyen a mantenerla sana al impedir la proliferación de patógenos responsables de molestias e infecciones. Por ello, hay que fijarse bien en qué gel usar para la higiene íntima, ya que solo los productos específicos ayudan a mantener el pH íntimo balanceado. Estas son las razones por las que es importante que el pH vaginal no pierda su equilibrio:
- Para mantener nuestra salud íntima: un pH adecuado asegura la supervivencia de la flora bacteriana natural y saludable de la vagina. Una modificación en el pH altera esta flora y desequilibra las poblaciones bacterianas, surgiendo las molestias.
- Para prevenir infecciones vaginales: ten en cuenta que el 75 % de las mujeres experimentarán una infección vaginal a lo largo de su vida*. La raíz de estas infecciones es un pH vaginal desequilibrado. Si crecen bacterias patógenas, se desencadena una infección.
- Para prevenir otras molestias íntimas: aunque no llegue a producirse una infección, lavar la zona íntima femenina con productos poco adecuados y demasiado agresivos puede causar molestias como picor, ardor o malos olores.
¿Qué jabón usar para la higiene íntima?
Si buscas un buen jabón íntimo, estas son las características en las que te debes fijar:
- Que ayude a equilibrar el pH vaginal, por lo tanto, su pH debe coincidir con el vaginal y su formulación respetar la flora bacteriana natural.
- Que no contenga sustancias irritantes, de esta forma, se previene la aparición de reacciones alérgicas.
- Que esté especialmente diseñado para la zona íntima y ofrezca un efecto suavizante, refrescante y calmante.
Ten en cuenta que hay jabones que no debes usar, por ejemplo, los formulados para el cuerpo, aquellos con ingredientes agresivos como los alcoholes o los de efecto antibacteriano. El motivo es que pueden resultar demasiado fuertes para esta zona tan delicada.
Así, si te preguntas qué jabón usar para la higiene íntima, prueba la gama de geles íntimos de Durex Intima Protect, con un gel calmante y otro gel refrescante. Ambos de uso diario, su acción se basa en mantener el pH vaginal equilibrado, de forma que se evitan molestias. Para ello, recurren a la fórmula Pro-pH. Además, cuando ya ha habido un desequilibrio, limpian, suavizan y ayudan a calmar tanto las molestias vaginales como el mal olor.
Descubre nuestra gama de cuidado vaginal
Otras recomendaciones para mantener la higiene vaginal
Además de utilizar productos adecuados para preservar el pH y, por tanto, la salud de tu zona íntima, ten en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Lava correctamente la zona íntima: limpia a diario la zona genital externa con agua y jabón neutro. Para el interior, utiliza solo productos específicos. Salvo prescripción médica, no te hagas duchas vaginales, ya que son perjudiciales porque eliminan la flora vaginal saludable. Al finalizar la higiene, sécate bien con una toalla suave.
- Límpiate adecuadamente cuando vayas al baño: tras acudir al servicio, límpiate siempre de delante hacia atrás para no trasladar bacterias de la zona anal hacia la vagina. Si utilizas toallitas, que sean específicas para esta zona.
- Escoge bien tu ropa íntima: se recomiendan tejidos naturales como el algodón para garantizar la transpiración. El exceso de humedad y el calor constituyen un ambiente ideal para el crecimiento de hongos. Cámbiate la ropa interior a diario y siempre que la notes mojada.
- Practica sexo seguro: el uso del preservativo no solo previene embarazos no deseados, sino que te protege de infecciones y de enfermedades de transmisión sexual.
- Cuídate durante la regla: cámbiate compresas, tampones, salvaslips o vacía la copa menstrual cada 4-6 horas para evitar molestias.
Fuentes:
- NHS (2017) Vaginitis.
- IP New Template, May 2017, RB internal document.
- * Revista Oficial de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia, Diagnóstico y tratamiento de las infecciones vulvovaginales: 2016